Entre las promesas políticas más destacadas, se mencionó la entrega automática de “green cards” a estudiantes internacionales graduados en universidades estadounidenses y la modificación del sistema H-1B para priorizar a profesionales con habilidades estratégicas. Si el presidente electo sostiene esta propuesta después de asumir el cargo, y si el congreso aprueba la legislación necesaria, la política podría facilitar el camino para que potencialmente millones de estudiantes internacionales se conviertan en residentes permanentes legales. 

Pero aún son grandes interrogantes, especialmente porque Trump no ha mencionado públicamente la propuesta desde que la planteó por primera vez, y hay muchos detalles que aún no sabemos sobre cómo abordaría su nueva administración este tema.